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viernes, 23 de enero de 2015

Reflexionando sobre la motivación negativa.



"No eres bueno!", "Nunca llegarás a nada!", "¡Eres tan estúpido!", "¿Eres tonto o qué ?!", "¿Cómo puedes ser tan tonto ?!" ¿Cuántas veces hemos oído esas palabras de pequeños? Estoy seguro de que sois de esos niños que nunca han escuchado esas palabras de la boca de su padre, pero apuesto a que hay más niños que lo oyen.

Yo escuché esas palabras y venían de mis padres. De más mayor no me lo decían, pero al crecer como un niño, queriendo yo pensaba que estaba haciendo mal las cosas. Mis padres eran buenos padres y ellos siempre querían el bien para todos nosotros, pero cuando estaban cabreados, no eran “mis padres”.

El daño estaba hecho. ¿Esas palabras me afectaron en la vida? Sí lo hicieron! Luché en la escuela en todo lo pude. Si parecía difícil, pensaba que no podía hacerlo porque era tonto o estúpido. Esas palabras  me habían hecho daño y me dijo que tenía un problema de aprendizaje así que me pusieron en una clase de recuperación en la escuela primaria. Era embarazoso para mí, incluso a esa edad, pero estaban equivocados.

A pesar de que mis padres dijeron esas palabras dañinas para mí, no era todo el tiempo, en verdad no era casi nunca. Sin embargo, todavía tienen un impacto en mi vida hasta que me enteré de las cosas que voy a decirte. Mi hermano mayor, que es 18 años mayor, era un hermano impresionante. Nunca hablaba a mí, pero siempre me ayudaba. Habló bien de mi a mis hermanos y hermanas de todo mientras nos enseñaba cosas diferentes. ¿De dónde sacó todo aquello? No tengo ni idea.

Escribo para aquellos niños cuyos padres siempre decía esas palabras perjudiciales para ellos. Dios mío, qué daño habrá hecho. La mayoría de esos niños están en pandillas, las drogas y son incapaces de alejarse de esa lengua de serpiente llena de maldad o de suicidarse a causa del mal que se ha dicho o hecho a ellos. A nadie le gusta ser degradados o falta de respeto.

Una gran cosa que aprendí en los últimos años que cambió mi vida y lo sigue haciendo, es que nadie es tonto y nadie es tonto, especialmente los niños. ¡Oh, cómo me hubiera gustado que alguien me lo hubiera dicho, lo que voy a compartir con ustedes. Compártelo con tus niños y otras personas porque es verdad.

Hay tres etapas que todos hemos pasado y pasará cada vez que nos embarcamos en aprender algo nuevo. Nunca nos ha enseñado esto en la escuela o en mi casa, por lo tanto se nos dice esas palabras feas, dejando que nos afecten.

La etapa difícil

Esta es la etapa en la que la mayoría de las personas se dejan. Esto es por qué las personas se dicen a sí mismos que no pueden hacerlo. No importa lo que queremos aprender, podemos aprenderlo y no somos estúpidos o tontos. Podríamos sentirnos de esa manera en esta etapa, pero no lo somos.
En esta etapa de nuestras mentes y nuestros cuerpos no se han convertido en uno en el aprendizaje de la nueva empresa. Se necesita tiempo para que la mente se convierta en uno con el cuerpo y supere esta etapa difícil.

Es como la primera vez que un bebé trata de caminar o el niño trata de andar en bicicleta por primera vez. El niño empieza a tambalearse en la bici y parece que se olvidan de que la bicicleta tiene frenos. Todos lo hemos visto; el niño termina corriendo y luego cae. El bebé tratando de caminar sólo avanzar unos pasos y luego caer. Esta es la etapa difícil.
Si todos lo dejáramos en esta etapa, ninguno de nosotros estaría andando en este momento. Hemos pasado por esta etapa cientos, si no miles de veces, a medida que comenzamos a aprender algo nuevo.

La etapa de aprendizaje

Sólo hay una manera de aprender algo nuevo y es hacerlo una y otra y otra vez. En esta etapa, la velocidad a la que se aprende será determinada por la experiencia previa que tiene en algo que es similar.
Si has trabajado con los ordenadores y que estás tratando de aprender un nuevo software de una compañía diferente, habrá similitudes con el software. Puesto que no es algo que va a ser igual, el proceso de aprendizaje será más rápido que alguien que no tiene la experiencia previa.
Lo mismo es con los niños. Ellos aprenden más rápido si se familiarizan con lo que están tratando de aprender.

La Etapa Instintivo


En esta etapa la mente y el cuerpo se han convertido en una y la tarea que estabas tratando de aprender se ha convertido en algo que haces sin darte cuenta. Esta es la etapa en la que te has convertido en un profesional en lo que haces. En esta etapa, ni siquiera tienes que pensar en lo aprendido, lo haces naturalmente. Esta es la etapa en la que todos queremos llegar cuando queremos aprender algo nuevo.

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