No importa el lugar donde vivimos, donde está
el cuerpo está el peligro (como decía mi madre). Podría ser un accidente de
coche. Puedes perder el control en una carretera helada, salirte de la
carretera por el cansancio... Lo que tenemos en el coche podría ayudar a
impedir que una pequeña emergencia se convierta en una catástrofe.
Botiquín de primeros auxilios: Un conductor nunca debe estar sin uno y si es uno bien surtido, mejor.
Asegúrese de que tienes vendas, gasas y esparadrapo en buenas condiciones,
antibióticos y un par de guantes. Puedes necesitarlos o no, pero siempre es
mejor prevenir que curar.
Kit de reparación:
Por lo menos estar seguro de tener un conjunto de pinzas, un gato y una llave
de tuerca. Si sabes mirar alrededor del motor, necesitarás las herramientas
apropiadas.
Ropa: Un cambio de
ropa y zapatos es algo que puede ser necesario para ciertas emergencias. Si te
pones tacones altos y trajes para el trabajo, no desearás caminar unos
kilómetros para llegar a casa o a una gasolinera cercana vestidos de forma
incómoda.
Teléfono móvil: No
es necesario decir que siempre debemos llevar el teléfono móvil cargado encima.
Puede parecer algo normal, pero con el tema de los smartphones y las conexiones
a internet, puede ser que nos quedemos sin batería sin darnos cuenta.
Cosas generales:
Tener alimentos, agua y una manta térmica o dos debe ser estándar para
cualquier equipo de emergencia. Las linternas que funcionan con dinamo puede
ser muy útil. También es recomendable llevar un pequeño extintor debajo del
asiento para pequeños fuegos.
Esto es algo que se puede personalizar un poco.
Sin embargo, si tomas medicamentos recetados, debes tener provisiones. Lo mismo
ocurre con las gafas graduadas. Piensa en lo que podrías necesitar en caso de
emergencia.
Recuerda que esto son tan solo unos consejos.
Si quieres formarte en accidentes de tráfico, puedes matricularte en algún
curso online.
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